Juan de los Santos, un ex agente antidrogas que estuvo a punto de acabar con el cartel más grande de Latinoamérica, lo ha perdido todo; su esposa e hijos fueron brutalmente asesinados y con ellos sus ganas de vivir. Juan sobrevivió pero no salió ileso; esa misma noche él recibió dos balazos, uno en el pecho y el otro en la cabeza. La bala que dañó su cerebro aún se encuentra allí, haciéndole perder la memoria esporádicamente. En constante lucha interna y externa con sus propios demonios, Juan debe ir en contra de todos los pronósticos para infiltrarse en el cartel que lo mandó eliminar y desbaratar un plan para inundar los E.U.A. con una nueva y poderosa droga. Con el trasfondo de la mística ciudad de Asunción, sus luces y sus sombras, Juan y el más insólito grupo de aliados harán lo imposible para vencer a los mercenarios de Don Cáceres y liberar a cientos de personas inocentes. Lo que Juan no sabe es que del Infierno no hay salida.